Lejos de las arremolinadas arenas del desierto de Gerudo, Zelda se adentra en la solemne Cueva del Descanso de los Ancestros, dispuesta a reparar las grietas que amenazan con separar el mundo.
Pero, como en todas partes en Ecos de sabiduría, la Cueva del Reposo de los Ancestros esconde mayores secretos de lo que parece. Para explorarla a fondo, tendrás que usar todas las herramientas mágicas que has acumulado hasta ahora y no dejar piedra sin remover, literalmente.
Zelda: Echoes of Wisdom Cueva del descanso de los ancestros
Cuando entres en la Cueva del Descanso de los Ancestros, el guardia Gerudo te mostrará la grieta que divide la cámara funeraria en dos y te pedirá que vuelvas a encender las llamas que rodean el sarcófago del otro lado.
Crédito de la imagen: Nintendo/NewHotGames
Para continuar, pulsa X para lanzar Tri al peñasco gigante de la esquina inferior izquierda de la sala y sepáralo de la puerta.
En la siguiente sala, tendrás que jugar al topo, derrotando a los Holmills a medida que sacan la cabeza de la arena.
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Los carmadillos o los erizos de mar sirven, pero es probable que ya tengas tus Ecos de combate preferidos. En cualquier caso, el Holmill es un Eco vital, ya que te permitirá excavar a través de superficies blandas.
Cuando hayas terminado, aparta la gran roca que hay en la parte superior de la sala para que aparezca una escalera y baja por ella.
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En la siguiente sala, lanza un Eco Holmill sobre la arena y hará un agujero por el que podrás caer al nivel inferior.
Asegúrate de caer primero por el lado izquierdo para coger el cofre oculto aquí (que te proporcionará unos preciosos Huevos de Oro) antes de avanzar hacia el lado derecho de la pantalla.
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En la esquina inferior derecha encontrarás un Ignizol, que podrás usar para encender las antorchas más adelante si aún no has conseguido su Eco. De nuevo, en cualquier caso, sube la escalera y luego usa un Eco de fuego como el Ignizol para encender los braseros a ambos lados del sarcófago.
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A continuación, serás teletransportado de vuelta a la entrada, donde el guardia te agradecerá tu ayuda, pero parece que no podrás cerrar la grieta desde aquí. Una vez hecho esto, dirígete de nuevo al desierto para encontrar tu siguiente ubicación.